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Blanca Tafur, hija de Miriam Sevilla, la mujer que murió al recibir una fuerte descarga eléctrica en 2008 en Barranquilla.
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Hansel Vásquez

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“Electricaribe nos decía que no respondían por electrocutados dentro de una casa”

Testimonio de la mujer que hace 7 años vio a su madre morir electrocutada cuando adelantaba tareas domésticas en su casa en Villa San Carlos.

Con el recuerdo intacto de la muerte de su señora madre Miriam Sevilla Payares, Blanca Nelsy Tafur, una mujer que se gana la vida como empleada doméstica en el norte de Barranquilla, asegura que por más que haya una condena contra Electricaribe, sabe que nunca va a recuperar a su progenitora.

Los hechos tuvieron como escenario una casa de la calle 98 B número 1 sur del barrio Villa San Carlos, en el suroccidente de Barranquilla, el 17 de agosto de 2008.

“Mi mamá ese día fue a desconectar una extensión conectada a un enchufe que estaba en la cocina. En ese momento hubo una alteración del alto voltaje, la extensión se le prendió y la mató instantáneamente” recuerda entre llantos la Blanca Nelsy.

Miriam Sevilla

Miriam Sevilla Payares era una mujer de 63 años, viuda, madre de  dos hijos y abuela de cinco niños.

“Sólo Dios sabe cómo me siento yo... nunca voy a recuperar a mi madre” dijo Blanca Nelsy a Zona Cero, haciendo un alto en su tarea de empelada doméstica.

La mujer reprocha que en su momento “Electricaribe nos dijo que no respondían por personas que se electrocutaran dentro de una casa. Fue lo único que nos dijeron”.

Todavía con mi dolor que llevo por dentro” dice.

Zuly Cortés

En ese entonces la familia no tuvo más que acudir a la abogada amiga Zully Cortés, quien asumió su defensa en los estrados judiciales y consiguió la condena que en última instancia profirió el Tribunal Superior de Justicia de Barranquilla contra la empresa de servicios públicos domiciliarios.

Hoy, siete años después y con una empresa condenada, a Blanca Nelsy lo que más le preocupa es que en su barrio “la situación por alteración del voltaje  sigue siendo la misma”.

La sentencia es de última instancia y no le cabe ningún recurso.

 

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